Si me sigues desde hace tiempo seguro que has adivinado algunas de mis pasiones. Ya hay plantas y flores, en macetas o secas, coloreadas o con tonos neutros, para contemplar, dejar crecer, ver crecer o recoger, ahí también todo me conviene. Me gusta transformarlos en infusión o incluso en té a veces... la hora del té, una de mis segundas pasiones, muchas veces acompañada de un pequeño capricho. Un pequeño dúo que sólo puede alegrar una tarde de mimos exitosa. Y luego, siguiendo mis publicaciones, inevitablemente te topabas aquí y allá con las caras de Reglisse o de Ody, mis dos amadas bolas de pelo.
A ellos
Entonces, al escribirles, me doy cuenta de que hay “algo” que muestro poco, probablemente por pudor o también por respeto, porque ellos, estando en las redes, tendrán mucho tiempo para elegirlo. A pesar de todo, son mi día a día, mis sonrisas, mi valentía cuando a veces es menos fácil. Tienen dos. Ahí está Nael, mi cabecita alta, rubia, llena de inteligencia y fanática de OM. Y ahí está Louise, su hermana pequeña, mi soñadora, mi amada, que nunca está lejos de mí cuando estoy filmando a menos que esté dibujando, porque cuando Louise dibuja, el tiempo se detiene. Podría contarte muchas otras cosas sobre ellos, su pasión por Harry Potter, lo que les gusta comer además del helado en verano, sus colores favoritos, el azul para él, el morado para ella... tantos. en nuestra cama, no te diré cuál... y muchos secretos más, pero no hace falta que digas más. Sobre todo quería revelaros esta parte de mí que no suelo mostrar.
(dibujo de Louisette :-))
Precioso jardín
Sin embargo, son más que un jardín secreto, son un jardín precioso y su presencia es vital para mí. Igual que su papá. Mi madre, mi marido, mi tierna, mi segundo aire. El que se esconde detrás de cada una de mis publicaciones (y las reales), el que me lleva al límite, el que me hace más fuerte y el que me ayuda a creer en mí mismo. Pero algún día les contaré más, tengo muchas ganas de dedicarle un artículo completo, en particular sobre su trabajo y su capacidad para ser emprendedor, camarógrafo, papá, vendedor, en fin... ya lo entiendes. ¡Necesito más palabras! La parte principal del secretito de esta segunda newsletter era sobre todo contaros un poco más sobre mi capullo diario, mi familia... y ya os he dicho bastante.
Crédito de la foto: Dalale Shoeir.
Quería aprovechar todo este “positivo” para desearles en 2022 que tengan o encuentren, como yo, este capullo sencillo y reconfortante, con sus pequeñas imperfecciones a veces también, nadie es perfecto, pero que me hace feliz al mismo tiempo. mismo tiempo diariamente y que sinceramente creo que será tuyo para este nuevo año. Tendrá tus códigos y tu propia definición, mientras te haga feliz, será tu pequeño capullo perfecto. El mío en cualquier caso seguirá, cada día, acompañándome e inspirando mis futuras creaciones... ¡Feliz año nuevo!